Oye amor.
Mande, gorda.
¿Quieres un gorrito?
¿Gorrito? ¿Gorrito de qué?
De baño, güey.
Ah. ¿Pus como pa' qué?
Pues para que no se te moje el pelo.
¿Pues entonces qué me voy a lavar?
¿El cuerpo, no?
Ah, no. Nunca me lavo el cuerpo.
¿Entonces qué haces cuando te bañas?
Me lavo el pelo y espero que el shampoo que se me resbala haga que huela bonito.
No mames, eres un pinche cerdo.
Oh pues... ajá.
¿Qué? ¿Qué ibas a decir?
No, nada.
Anda, dime.
No, es demasiado vulgar.
Ya dime o me enojo.
Es que si te digo también te vas a enojar.
Me enojo más si no me dices.
No...
Ya. ¿Me vas a decir?
¡Oh! ¡Que me da pena!
Pues no se apene. Ya dime, Gabrielito.
Está bien, esta bien. Pero no te me vayas a alzar, eh.
Va. Viene.
Iba a decir que "seré cerdo, pero de este chorizo comes".
1 comentario:
Jaja.
Me agradó; bueno, me dio risa.
Gabrielito. Hhmm...
Cerdito...tocino...
Tocinito, jajaja.
Ay...
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